Así se titula este artículo de Fernando Acero en Kriptopolis.org.
Asómense a leerlo un poquito (es bastante técnico) y díganme si no están de acuerdo conmigo en que la conclusión lógica es que el momento del voto electrónico no llegará NUNCA, porque es tal la maraña tecnológica que lo rodea que los ciudadanos nunca podremos confiar en él, sin hacer un acto de fe absolutamente ciego en los tecnólogos.